Si antes apostaba por estilismos rockeros y transgresores en los que no faltaban cazadoras de cuero, vaqueros negros y botas moteras, ahora la actriz prefiere la discreción y esa regla básica de menos es más.
Aunque en una entrevista concedida a la edición americana de la revista Vogue en 2002 confesó que no sentía predilección por ningún diseñador .Seguramente por eso me consideran una de las celebrities que comente más errores a la hora de vestir, afirmaba.
De un tiempo a esta parte la actriz ha elegido favorecedores diseños de Versace, Tom Ford y Ungaro, creando looks minimalistas muy lady y siempre en tonos oscuros. En su fondo de armario no faltan vaqueros de las firmas Joe´s Jeans y J. Brand Jeans, maxigafas de D&G y alguna que otra adquisión de tiendas vintage, como un comentado vestido de tan sólo 26 dólares que lució en una alfombra roja y que había comprado en Wasteland, una tienda ubicada en Melrose Avenue, en Los Ángeles.
En cuestiones de belleza afirma que siempre lleva un poquito de maquillaje -"Bueno, no siempre, cuando estoy morena me gusta ir natural"- y que apuesta por colores de labios claros le encantan las barras de MAC- que aclaren su color natural. Aunque pueda sonar raro, no me gusta su color, es un rojo muy brillante, afirma.
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